Hallan hombre tiroteado y calcinado en matorral
En el sitio se evidenciaban líneas de sangre en el pavimento, lo que hace presumir que el cuerpo fue arrastrado al menos 30 metros, cerca de la avenida Fucho Tovar.
Rosalymir Fernández
Conductores curiosos se acercaban a ver el cuerpo de un hombre baleado y calcinado, hallado en las adyacencias de la avenida Fucho Tovar, a la altura del Nucleo Nueva Esparta de la Universidad de Oriente.
En el sitio se apreciaba un gran charco de sangre, sobre el cual yacía un cadáver, aún humeante por el efecto de las llamas.
El occiso, de quien presumen una edad aproximada de 27 años, fue encontrado por funcionarios del Instituto Neoespartano de Policía (Inepol). Al lugar del suceso se presentaron efectivos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) para el levantamiento del cadáver y la recolección de evidencias.
En la escena del crimen se evidenciaron líneas de sangre en el pavimento, lo que hace presumir que el cuerpo fue arrastrado al menos 30 metros.
Los funcionarios del Cicpc, bajo el mando del comisario Alirio Cermeño, jefe de la subdelegación de Porlamar del cuerpo detectivesco, tras las primeras pesquisas en el sitio, informaron que se presume que el crimen ocurrió en horas de la madrugada.
Para el jefe policial, las características del hecho hacen presumir el ajuste de cuentas como móvil.
“Presuntamente lo encapucharon, luego le dispararon y posteriormente lo arrastraron, para finalmente rociarlo con combustible y tratar de borrar las evidencias”, dijo el comisario Cermeño.
A unos metros del cuerpo se colectaron dos casquillos de bala calibre 9mm y una funda de almohada de color blanco, con la que probablemente le taparon el rostro a la víctima.
El cuerpo fue trasladado hasta la morgue del hospital Luis Ortega de Porlamar, donde los médicos le apreciaron una herida por arma de fuego en la región parietal.
El cadáver no tenía identificación, por lo que el comisario Cermeño afirmó que mediante necrodactilia así como odontología y antropología forense determinarán la identidad del fallecido.
Conductores que transitaban por el lugar y pidieron no ser identificados, comentaron que vieron correr por la escena del crimen a varios sujetos encapuchados y sin armas.
“¿Cómo es posible que ya no tengamos paz? Nueva Esparta era un estado tranquilo y no se veía este tipo de muertes. El gobernador y las demás autoridades deben implementar un nuevo sistema para desmantelar todas las bandas delictivas, para no vivir en zozobra”, dijeron los transeúntes que observaban la escena.
En horas de la tarde de ayer todavía no se había determinado la identidad del sujeto.
Rosalymir Fernández
Conductores curiosos se acercaban a ver el cuerpo de un hombre baleado y calcinado, hallado en las adyacencias de la avenida Fucho Tovar, a la altura del Nucleo Nueva Esparta de la Universidad de Oriente.
En el sitio se apreciaba un gran charco de sangre, sobre el cual yacía un cadáver, aún humeante por el efecto de las llamas.
El occiso, de quien presumen una edad aproximada de 27 años, fue encontrado por funcionarios del Instituto Neoespartano de Policía (Inepol). Al lugar del suceso se presentaron efectivos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) para el levantamiento del cadáver y la recolección de evidencias.
En la escena del crimen se evidenciaron líneas de sangre en el pavimento, lo que hace presumir que el cuerpo fue arrastrado al menos 30 metros.
Los funcionarios del Cicpc, bajo el mando del comisario Alirio Cermeño, jefe de la subdelegación de Porlamar del cuerpo detectivesco, tras las primeras pesquisas en el sitio, informaron que se presume que el crimen ocurrió en horas de la madrugada.
Para el jefe policial, las características del hecho hacen presumir el ajuste de cuentas como móvil.
“Presuntamente lo encapucharon, luego le dispararon y posteriormente lo arrastraron, para finalmente rociarlo con combustible y tratar de borrar las evidencias”, dijo el comisario Cermeño.
A unos metros del cuerpo se colectaron dos casquillos de bala calibre 9mm y una funda de almohada de color blanco, con la que probablemente le taparon el rostro a la víctima.
El cuerpo fue trasladado hasta la morgue del hospital Luis Ortega de Porlamar, donde los médicos le apreciaron una herida por arma de fuego en la región parietal.
El cadáver no tenía identificación, por lo que el comisario Cermeño afirmó que mediante necrodactilia así como odontología y antropología forense determinarán la identidad del fallecido.
Conductores que transitaban por el lugar y pidieron no ser identificados, comentaron que vieron correr por la escena del crimen a varios sujetos encapuchados y sin armas.
“¿Cómo es posible que ya no tengamos paz? Nueva Esparta era un estado tranquilo y no se veía este tipo de muertes. El gobernador y las demás autoridades deben implementar un nuevo sistema para desmantelar todas las bandas delictivas, para no vivir en zozobra”, dijeron los transeúntes que observaban la escena.
En horas de la tarde de ayer todavía no se había determinado la identidad del sujeto.
Comentarios
Publicar un comentario